Todos hemos escuchado y temido la palabra apocalipsis, la cual es sinónimo de fin del mundo, destrucción, caos, etcétera, y aunque la palabra significa “Revelación”, es difícil no pensar en algo negativo al escucharla. La aversión a esta palabra se origina en la Biblia, ya que su último libro tiene ese nombre, el único que es profético y narra lo que sucederá al final de los tiempos, y de este texto es sobre lo que tocaremos en esta columna, específicamente en los eventos y seres que son mencionados.
El libro del apocalipsis fue escrito por Juan, y en este texto narra lo que se le permitió ver cuando ocurra la segunda venida de Cristo, todo desde la primera fila, ya que lo ve desde el cielo, en calidad de invitado, nunca como partícipe de esta catástrofe. Leí este texto en su totalidad un par de ocasiones y lo que describe es bastante sorprendente: desde seres que salen del mar, monstruos con coronas y sonidos que retumban en toda la tierra.
Como ya había dicho, describiré los eventos y seres que más me sorprenden, pero antes me gustaría mencionar que este texto no es para que se tome de forma literal como mucha gente lo hace, debe de ser percibido en sentido figurado, ya que está plagado de simbolismos y de seres imaginados, ligados principalmente a la época en la que fue escrito.
Empezamos con un evento que no es mencionado en la Biblia que todos conocemos pero es señalado en algunos círculos cristianos menores: El rapto, el cual consiste en que dios llamará a todas las personas vivas y muertas a su lado y que hayan vivido una vida cristiana, y marcará el inicio del apocalipsis. Este rapto o arrebatamiento ocurriría en cualquier momento y puede suceder en 2 formas, la primera sería que, de la nada, algunas de las personas que te rodean simplemente desaparecerán, dejando solamente la ropa que vestían, cayendo al suelo, o puede suceder que simplemente su cuerpo quede en estado vegetal, como un cascarón vacío, indicando que dios llamó su alma antes del evento principal, para evitarles que experimenten el fin de los tiempos. Existen 2 películas que ejemplifican este evento: “El remanente” y “Left behind” esta última con Nicolas Cage, bastante recomendables.
El siguiente evento es uno que todos conocen, la apertura de los 7 sellos, y los más conocidos son los primeros 4, que al abrirlos aparecen los temidos jinetes del Apocalipsis: el primero de ellos montando un caballo blanco, usando una corona y un arco, y salió vencedor y para vencer. Este jinete tiene diversas interpretaciones sobre quien podrá ser, desde Jesús hasta una alegoría de la iglesia misma, como sea es alguien que le será dado el poder de la conquista.
El segundo jinete monta un caballo rojo, y se le da el poder de quitar la paz de la tierra, además de que hace que los hombres se maten entre sí. La identidad de este jinete es fácil, es la guerra, el color rojo del caballo simboliza la sangre, puede representar tanto un conflicto armado en específico, como una persona, uno de las tantos personajes históricos relacionados con este jinete es Adolf Hitler, por el conflicto armado que desató hace menos de 100 años del que muchas naciones, incluida la nuestra, formaron parte.
El tercer jinete monta un caballo negro y tiene una balanza en la mano, y una voz exclama el precio del trigo y la cebada, pero sin dañar el aceite ni el vino. Este jinete es la hambruna, el color negro del caballo lo identifica con la muerte, además de que la balanza que tiene es precisamente para medir dos de los granos más ocupados en la alimentación del hombre, y de acuerdo a interpretaciones, el precio especificado es bastante alto para ser pagado, con respecto al aceite y vino que se menciona no deben ser dañados, seguramente es porque estos dos son usados en las ceremonias católicas, significando que en lo que respecta a la iglesia no deben de ser tocadas.
El último jinete montaba un caballo amarrillo, tiene por nombre muerte, y el infierno le seguía. De los 4 jinetes es el único al que se refieren por un nombre, el color de su caballo se asocia al color de los huesos, aunque en también lo describan con color amarillo o hasta verde, tiene las misma conotaciones fatales.
Los siguientes sellos no son tan sorprendentes excepto el sexto, que entre otras cosas, incluye un gran terremoto, el sol poniendose negro y la luna como la sangre.
Lo que sigue después de los sellos son las 7 trompetas, que traen la destrucción parcial de las personas, los mares y ríos, caída de meteoritos y oscuridad parcial, 4 ángeles que se encargan de diezmar la población humana, junto con langostas, similares a caballos, con coronas en la cabeza y cara semejante a la de un hombre.
La retahíla de eventos catastróficos continua durante un buen rato, incluyendo bestias que salen del mar, falsos profetas, bestias con 10 cabezas y usando coronas, terremotos como ningún otro, el famoso número de la bestia 666, juicios y para terminar, el encarcelamiento de la gran bestia y el falso profeta por mil años.
El apocalipsis se ha ganado un lugar muy importante en el imaginario colectivo por todo lo que contempla, y cada cierto tiempo gana popularidad porque algunos eventos descritos en este libro suceden en nuestro tiempo, o parcialmente, o lo interpretan de esa forma, de cualquier forma es solamente un libro, no es algo que sucederá realmente, es como decir que lo que se describe en el libro “1984” pasará…. ¿o ya se cumplió lo que dijo Orwell? Preguntas que no obtendrán respuesta, por ahora.