Ezequiel González
Este lunes, al menos 300 locatarios del mercado Emilio Sánchez Piedras, salieron a las calles con pancartas y lonas para reafirmar su negación a la demolición de la estructura comercial.
En una marcha que inició desde las instalaciones del mercado, los quejosos acusaron la poca información que se les proporcionó por parte de las autoridades en torno a la remodelación del mercado a cargo de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
En este sentido, se debe mencionar que los mercaderes se rigen bajo el lema “No a la demolición, si a la remodelación” haciendo referencia a que apoyan el plan de modernización, pero sin derribar la infraestructura del mercado.
También su inconformidad se debe a que mientras se remodela el lugar, a los mercaderes los quieren reasignar en las instalaciones de Soriana Híper, hecho que les generaría un declive en su economía, aunado a que al retornar al mercado, no está garantizado que la totalidad de los locatarios tengan un lugar designado.

Por tal motivo y ante la circulación de noticias donde se explica que ya hubo un acuerdo con los comerciantes, estos se vieron obligados a marchar con miras al Palacio de gobierno y la presidencia de Tlaxcala para pedir a ambas autoridades dejen de mentir con esa información.
De igual modo, se supo que el 5 por ciento de comerciantes que aprueban la demolición, han empezado a hostigar al resto del gremio para que se acepte el derrumbe del mercado.
Finalmente, frente a la alcaldía capitalina, los quejosos iniciaron un plantón pacífico hasta que la comisión designada entró a la presidencia municipal para entablar diálogo con las autoridades correspondientes y dar una solución a su querella.