David Reyes

Trabajadores de la Secretaría de Educación Pública del Estado y de la Unidad de Servicios Educativo del Estado de Tlaxcala (SEPE-USET), impidieron el acceso a esta dependencia, en exigencia de que se haga efectiva de manera inmediata la destitución del titular de Contraloría Interna.

Exigiendo al secretario de educación Homero Meneses Hernández, no dilatar más está demanda, por ello como medida de presión impidieron que se iniciarán actividades en la SEPE-USET, sin embargo también se hicieron presentes elementos de la Policía estatal.

Es de recordar que desde el pasado jueves tuvo lugar la toma de las instalaciones de SEPE-USET, por parte de trabajadores encabezados por la delegada sindical Gwendolynee Amaro.

Misma que acuso en un vídeo, que se emitió una orden de aprehensión en su contra, alegando represión por parte de las autoridades, y que estarían atentando contra su derecho a la libre manifestación y defensa de los derechos de los trabajadores.

Cabe señalar que está movilización, partió de denuncias en contra del titular de Contraloría por presuntos actos de acoso sexual y hostigamiento laboral contra trabajadoras, y de ahí la exigencia de su destitución.

Tras un par de horas de mantener cerradas las instalaciones, acudieron representantes de la Secretaría de Gobierno (SEGOB), quienes solicitaron que se permitiera el acceso a los trabajadores, además de acordar una mesa de diálogo, con presencia de la Secretaría de la Función Pública (SFP), y la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).

Sin embargo, se negaron a liberar las instalaciones, y tras varios minutos de diálogo con dirección de gobernación, no se lograron mayores avances.

Por lo que elementos del Grupo de Operaciones Especiales (Gopes), a empujones trataron de liberar el acceso principal de la SEPE-USET, junto con el jefe del Departamento de Atención a Grupos Sociales de la dependencia.

Posteriormente lograron ingresar varios trabajadores para retomar sus actividades, al mismo tiempo que los antimotines se apostaron frente a los accesos de la SEPE-USET, y los manifestantes se mantuvieron cerca para continuar externando su inconformidad, manteniéndose un ambiente de tensa calma.

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