David Reyes
De acuerdo con Maximino Hernández Pulido, con la llegada del cambio de administraciones municipales por las elecciones de 2024, los avances de certificación podrían verse vulnerados.
Ya que normalmente con la llegada de cada alcalde, suelen despedir a la plantilla anterior y contratar nuevamente, lo que hace que tengan que iniciar de cero el proceso de certificación.
Para esto, el titular de la Comisión Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública (CESESP), trabaja en una estrategia, para que quienes aprueben sus exámenes de control y confianza, tengan certeza laboral cada vez que venga una elección y cambio de mando.
“Estamos planteando a la gobernadora una estrategia… algún acuerdo que se lleve a cabo con la mesa estatal de seguridad, para que en la renovación de los 60 Ayuntamientos que está por venir, quien llegue no tenga esta visión de cambiar o correr a los policías, porque nos genera otra vez un boquete”, expresó.
Hasta el último corte, Hernández Pulido reveló que se lleva un avance del 51% y esperan que al término del 2023, alcancen por lo menos el 60% de certificación.
Al respecto dijo, que los retrasos en los exámenes son porque los policías no llevan su documentación completa en el momento de los trámites y ello complica el proceso, ya que todos los expedientes tienen que ser verificados por el Centro Estatal de Evaluación y Control de Confianza (C3) y se llevan tanto por los enlaces de los municipios como del gobierno local.
Estos obstáculos dijo, hacen que se tengan que reprogramar sus exámenes, pero aseguró que el proceso no dura más allá de tres días, a partir de eso el C3 tiene 60 días para emitir el resultado y los presidentes municipales y directores de seguridad, tiene que actuar en consecuencia.
Sobre estas metas, expuso que fueron fijadas al inicio del año, tanto para la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), como para los 60 municipios, “la semana pasada se terminó de firmar los convenios con los alcaldes solicitando la prórroga de tres meses para poder avanzar en los procesos de certificación, afortunadamente se ha avanzado en estos dos años de 10 por ciento al 51 por ciento”, de ahí que esperan a finales de año cerrar con al menos el 60 por ciento ya con todas las programaciones.
Para evitar, que nuevamente los Ayuntamientos se queden sin elementos de seguridad como cada trienio cuando los alcaldes les da por despedir a la plantilla de uniformados se plantea una propuesta que puede ayudar a aminorar este problema y que dé certeza laboral a los efectivos.
“Estamos planteando a la gobernadora una estrategia quizá de tipo legislativa, algún acuerdo que se lleve a cabo con la mesa estatal de seguridad, para que en la renovación de los 60 Ayuntamientos que está por venir, quien llegue no tenga esta visión de cambiar o correr a los policías, porque nos genera otra vez un boquete, el planteamiento es que todos los elementos que cuentan con certificaciones permanezcan, se les de esa certeza laboral, además que sepan que en el primer ejercicio del año los va a revisar de nueva cuenta el Órgano de Fiscalización Superior y pueden repetir la observación y algunos de ellos ya son residentes”.
Finalmente, el comisionado de Seguridad, Maximino Hernández Pulido, agregó sobre el mecanismo para mantener al personal policial, “para efectos operativos me parece que el mando único es viable para Tlaxcala”, concluyó.