Por Gandhi Vázquez

Recientemente, en mi trabajo comencé a realizar una práctica sobre la importancia de los protagonistas de este mes, los insectos, y cómo es que influyen en el ecosistema, si bien, hablar de todos de forma general, es hasta ofensivo para ellos, puesto que cada uno, cada especie, grupo, familia, juega un rol importante en el medio que nos rodea. Pero como todo, para estudiarlo, primero hay que comenzar a entenderlo.

Para comenzar, necesitamos conocer cuáles sí son insectos y cuáles no, para ello debemos remontarnos a la clasificación de los seres vivos de todo el orbe terrestre, los insectos pertenecen al dominio de los Eukaryotas, que se refieren a aquellos organismos formados por células con núcleo, el núcleo es un pequeño organelo situado dentro de casi cada célula de este tipo de seres vivos, y que dentro de sus principales funciones está la de almacenar la información genética. Siendo más específicos, tenemos a los reinos, y sí, los insectos son del reino animal, así como tú y como yo, y no en el sentido ofensivo sino en el biológico. Es complicado como biólogo definir de forma completa a los animales, porque siempre hay excepciones que confirman la regla, a pesar de esto los animales comparten ciertas características que los hacen ser y pertenecer a este reino: son eucariotas, por su tipo de nutrición que deben obtenerla a partir de materia orgánica, son heterótrofos, están hechos por más de una célula, es decir, son pluricelulares y en un 99% el conjunto de células con una misma función, forma tejidos.

Bajemos un poco más en la clasificación, aunque existen subreinos, superfilos, y otros más y más específicos que el conocimiento busca seguir definiendo para agrupar de mejor forma a toda la biomasa, la categoría que sucede a los reinos, son los filos, y los insectos pertenecen al denominado Arthropoda, los artrópodos.

Aquí es donde seguramente comienzan todas las confusiones que hemos tenido para reconocer a los insectos, puesto que cada vez más, las características se van pareciendo entre sí, por eso las agrupaciones cada vez son más específicas. Los artrópodos son el grupo más numeroso de todo el reino animal, además son invertebrados, como su nombre lo dice, carecen de columna vertebral, en cambio están dotados de un esqueleto externo, son los iron-man del reino animal, tienen una “armadura” que los protege, les da estructura y muchas más opciones que si habláramos una por una, no terminamos, se le llama exoesqueleto y está perfectamente articulado.

En este grupo además de los insectos, están los arácnidos, sí, las arañas, los escorpiones, los ácaros, las garrapatas, así es que ya sabemos, las arañas y todos estos, no son insectos, son arácnidos. También están los crustáceos, conocidos principalmente porque son comestibles y porque viven en el agua, pero es importante mencionar a uno que también a menudo se confunde con un insecto, la cochinilla, es sorprendente como el camarón de tierra no tiene otra forma más que un pequeño animalito con muchas patas que si se siente amenazado se hace bolita, y si lo siguen molestando, sigue en bolita. Por último un grupo que también he escuchado que llaman insectos, los miriápodos quienes agrupan a los cienpies y los milpies (paréntesis de cultura general, la palabra cienpies está mal escrita, o tiene un error ortográfico muy notorio, por eso la RAE lo aprueba sólo como ciempiés, perdiendo sentido y significado etimológico).

Ya vimos dominio, reino, filo, y los grupos que acabamos de leer y el grupo insecta, que es el protagonista, son parte de lo que se nombra como Clases. La clase de los insectos se llama Insecta y son la clase de más diversidad de todo el planeta, o sea, más que los arácnidos, miriápodos, crustáceos, mamíferos, peces, aves, etc., además de que los hay en casi todos los ecosistemas, acuáticos y terrestres. Gracias a que han existido desde hace más de 400 millones de años, y a que los procesos de extinción masivos como el que hizo que desaparecieran los dinosauros no los han afectado de forma importante, han tenido un proceso evolutivo impresionante, conservando y variando de gran manera su genética.

Los insectos tienen 3 características muy notorias y que nos servirán de guía cada que queramos saber si es o no es, la primera es que tienen un par de antenas, piensen en las arañas, éstas no tienen antenas, pero las mariposas sí, así como los chapulines, las libélulas, y más; la segunda característica es que son hexápodos, hexa = seis y podos = patas, nosotros, los seres humanos somos bípedos, y los perros cuadrúpedos, los insectos entonces, tienen 3 pares de patas; la última característica es que tienen dos pares de alas, que en muchos casos se han modificado como en los escarabajos, cuyo caparazón es un par de alas que se endurecieron para proteger con las cuales vuelan, en otros se han reducido como en los moscos y moscas, quienes sólo tienen un par de alas y en algunos grupos, han desaparecido como en piojos y pulgas.

El cuerpo de los insectos se divide en tres partes, la cabeza, de donde salen las antenas, el tórax, donde están ensambladas las alas y las patas, y el abdomen, la “colita”. La clase insecta tiene también diversas clasificaciones, llamados órdenes, y les contaré algunos de los más representativos: Las mariposas y polillas son lepidópteros; los chapulines, saltamontes, grillos son ortópteros; las libélulas son odonatos; los dípteros son las moscas y moscos; los dictiópteros son las cucarachas o las mantis; las pulgas son sifonápteras; las chinches pertenecen al grupo de los hemípteros; dentro de los coleópteros se encuentran todos los escarabajos, como las catarinas o los mayates, y finalmente les menciono al grupo de abejas, avispas y hormigas, cuyo grupo no lo escribo porque ya está registrado en el artículo del mes anterior, así es que igual te invito a que le des una vuelta.

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