Quejosos exigen a la PGJE esclarecimiento sobre el reconocimiento de los occisos Julio Cesar N, y Antonio N.
Faridhi Rodríguez
Para denunciar anomalías de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), un grupo de quejosos se manifestaron al exterior de las instalaciones antes mencionadas, por la falta de esclarecimiento en procesos de investigación que involucran la desaparición y hallazgo sin signos vitales sobre dos sujetos, de los cuales hasta el momento, sus cuerpos no han sido entregados a sus respectivas familias para recibir la debida sepultura.
Al respecto, María Teresa Doto, comentó para este medio de comunicación en entrevista, que ante una notable ‘ineficacia’ en cuanto al proceso de investigación por la dolosa muerte de su hermano Julio César N., de 34 años de edad, no habrá exigencia alguna de justicia.
No obstante, sí se exigirá la agilización de entrega y reconocimiento corporal del fallecido de aproximadamente 34 años de edad, misma que según el testimonio de familiares, se realizaría este día.
Al no recibir respuesta, la familia planteó pedir una audiencia con el procurador de justicia del Estado para estudiar el caso; sin embargo, sólo les fue notificado la continuidad de este proceso hasta dentro de tres días.
Por ello, y ante el incumplimiento y aplazamiento de la PGJE, en este proceso, la familia Doto, advirtió una marcha que evidencie el descuido del anexo La Providencia, así como la falta de respuesta de la PGJE.
Los hechos
De acuerdo al testimonio de María Teresa Doto, Julio Cesar N, fue anexado el pasado ocho de julio en La Providencia, ubicado en Chiautempan.
Posteriormente, el pasado 19 de este mes, Teresa Doto, recibió una llamada por parte de personal del anexo, en la que le informaron sobre la huída del sujeto de las instalaciones.
Hacia el pasado martes, las autoridades notificaron sobre el hallazgo sin vida de un sujeto en una barranca de San Bartolomé Cuahuixmátlac, Chiautempan, por lo que los restos fueron dirigidos a la PGJE para las diligencias correspondientes.
De acuerdo a un estudio realizado por el Ministerio Público, los restos corresponden a un sujeto masculino de aproximadamente 34 años de edad.
Desde el jueves de la misma semana, la familia Doto, fue solicitada para los estudios de genética para el reconocimiento; no obstante, desde entonces no hubo respuesta de las autoridades ni la posterior entrega del cuerpo.
Cabe mencionar, sobre el segundo caso de Antonio N, quien fue linchado el pasado 19 de julio en la comunidad de San Diego Xocoyucan, las autoridades resolvieron que las debidas diligencias de investigación seguirán su curso en un lapso aproximado hasta tres días, y al finalizar dicho periodo, los restos serán entregados a Juan Carlos N, hermano del occiso.
