Tratan de resolver el conflicto entre municipalidad, gobierno estatal y la empresa, por su parte, los protestantes bajaron la amenaza de tomar la empresa a la fuerza y cerrar carreteras.
Ezequiel González
La reunión entre pobladores de Papalotla hartos de la pestilencia generada por la empresa Procesos Biointegrales s.a. de c.v., y las autoridades municipales, dio un resultado nulo para los quejosos, toda vez que no se llegó a ningún acuerdo satisfactorio, salvo una pequeña auditoria para la factoría contaminante.
En entrevista, Gerardo N., quien es integrante de la Comisión representante, reveló que en lugar de planear alternativas para resolver los problemas del mal olor y la contaminación de agua, las autoridades municipales se deslindaron de la culpa y responsabilizaron a la administración estatal por permitir que la empresa continúe laborando.
No obstante, en anteriores meses, los mismos inconformes se manifestaron al frente del Palacio de gobierno, en la capital, quienes de igual manera, dijeron que su problema es de carácter municipal y no estatal, por lo que no intervinieron de la manera esperada.
Por tal motivo, Gerardo y la Comisión de la que forma parte, no descartaron que se trate de un negocio entre autoridades de ambos niveles y la factoría, toda vez que sin estar completamente establecida, la fábrica continúa en funciones.
A cambio, la Dirección de Protección Civil de Papalotla, se comprometió a hacer el envío de un oficio a la fábrica para que los directivos se vean obligados a presentar sus documentos y licencias para poder funcionar, esto ocurrirá el próximo 10 de marzo.
Por tanto, los quejosos dijeron estar a la espera que PC de Papalotla cumpla con su palabra y turne el documento solicitante para posiblemente dar solución al problema de olor y contaminantes, hasta entonces, los manifestantes bajaron sus amenazas de cierres carreteros y la toma a la fuerza de la empresa.